De los grandes avances que trajo consigo la blockchain, la posibilidad de crear juegos NFT es solo uno más entre ellos, pero probablemente del que mayor impacto se pueda prever a futuro para todas las comunidades digitales. Con el mercado en mínimos históricos, cómo se produzcan juegos NFT 2023 cambiará el funcionamiento de la industria.
Los juegos nft salen al mercado como una brillante respuesta al auge de dos dimensiones colosales: la blockchain y todos los avances que permite, y el mundo del gaming, con una comunidad cada vez más exigente y coherente con sus necesidades.
Suponen un avance ansiado, incluso predecible: los jugadores dedican muchas horas de su día a día a disfrutar de los videojuegos, siendo su única recompensa por ello el tiempo gastado. Esto ha convertido el mundo del gaming en una sucesión de juegos masificados de alta rotación en la que compiten ciertos títulos perpetuos como FIFA, CoD o Minecraft.
Los jugadores están conformes con esto de la misma manera que lo han estado desde que se inventaron los primeros videojuegos: el placer es jugar por jugar. Por diversión, sin beneficios. Pero ahora comprenden que las empresas que fabrican videojuegos cada vez dedican menos tiempo y esfuerzos a la producción de títulos de calidad y más a la venta masiva y los extras en los juegos, que ha descarrilado hacia fracasos estrepitosos como el Cyberpunk 2077 o la prohibición de la venta de loot boxes en varios países (packs aleatorios con diferentes porcentajes de “rareza” para comprar extras dentro de videojuegos).
Los juegos NFT nacerían por tanto para cubrir la falta de recompensa percibida por parte de los jugadores: ganar por jugar. Un jugador puede hacerse con ítems coleccionables únicos gracias a su dedicación en cada juego. Estos ítems coleccionables pueden ser intercambiados -o vendidos a otros jugadores- gracias a la blockchain en la que operan.
Es decir, figuradamente, si Minecraft estuviera en la blockchain, alguien podría dedicarse a fabricar espadas de diamante y venderlas a otros jugadores que prefieren no gastar el tiempo para minarlas por sí mismos.
Lamentablemente, @Papapishu, cuando compras un videojuego no eres completamente dueño de su propiedad, a pesar de que el recibo emitido por la distribuidora lo diga así. La gran mayoría de los juegos hoy en día dependen de los servidores online en los que se alojan, por tanto la empresa que los posea puede decidir clausurarlos en cualquier momento y tú no podrás acceder a la propiedad que dices poseer. Y aunque el juego esté guardado como archivo local, las desarrolladoras de juegos tienen el derecho de cambiar cualquier función relevante cuando se trata de cómo se juega. Podrían cambiar las condiciones y obligarte a tener que tener conexión a internet, o comprar un extra cuando les sea conveniente.
Pero si este es un cambio tan revolucionario, ¿por qué no son mainstream todavía?
No es ningún secreto que a los gamers no les gustan tanto los NFT y piensan que los juegos de NFT son simplemente una estafa más del mundo de las criptomonedas. Si bien este pensamiento está justificado, los NFT en estos juegos no deberían haberse implementado de la forma en que lo fueron.
La forma en que el mercado NFT se convirtió en un mercado impulsado por las ganancias “vacías” tuvo como resultado un aluvión de odio hacia él por parte de la comunidad de jugadores: los juegos NFT en general se volvieron descuidados, más incluso que aquellos tradicionales de los que intentaban huir, y solo se enfocaron en ganar dinero rápido, mientras que los desarrolladores ignoraron por completo el desarrollo, los gráficos y la experiencia de juego.
Los desarrolladores simplemente no pusieron esfuerzo y básicamente copiaron un modelo de negocio sencillo en el que explotaban el concepto de un juego exitoso con minúsculas diferencias. Una especie de bombardeo de juegos para smartphone…sin alma.
Afortunadamente, el mercado bajista terminó haciendo que muchos de estos juegos de bajo esfuerzo se fueran a cero y desaparecieran del mercado.
Claro, siempre habrá algunas excepciones, especialmente con los juegos NFT más antiguos y conocidos. Aavegotchi, por ejemplo, se mantuvo fiel a sus fundamentos y se limitó a brindar una buena experiencia de juego sin dejar de ser rentable para muchos. A día de hoy, se mantienen como uno de los pocos tokens que resistieron bien en comparación con otros alt durante el mercado bajista.
Otros juegos como Axie Infinity, aunque eventualmente se vuelven algo aburridos, siguen siendo de muy alta calidad en comparación con algunos de los juegos que fueron una completa estafa.
Después de la tormenta del “cryptocrash” de 2022, los fondos están volviendo a invertir en P2E de una manera diferente a la que vio el mercado bullish de 2021, un cambio tan radical que podrían cambiar cómo se producen y experimentan los juegos NFT de 2023 hasta el futuro lejano.
En este sentido, Bitdao podría ser el ejemplo perfecto. Han otorgado mas de quinientos millones a proyectos de alta calidad como Game7, que ya está desarrollando una plataforma de juegos de primer nivel. Esto sin mencionar que otros desarrolladores de juegos como UbiSoft y Atari también están ingresando a la escena de GameFi.
En 2023 y el futuro próximo veremos un cambio de paradigma en los P2E que va mucho mas allá del concepto original que les dio tan mala imagen durante el “cryptocrash” de 2022. Las desarrolladoras tienen que reinventarse y tener en cuenta las principales exigencias de sus consumidores:
1. El Juego Debe Ser Divertido
Esto parece obvio, pero el juego debería ser divertido. Si no es así, no tendrá más éxito que los ya criticados juegos-copia que solo existen con la mínima esperanza de que los ingenuos se unan para poder vender sus tokens, tierras o items, o cualquier otro artículo o práctica depredadora que tengan que forzar a comprar para subsistir. Deben ser juegos con historia, con nudo y desenlace, con detalle, con tiempo y dedicación, con talento. Deben ser, simplemente, juegos. No máquinas tragaperras.
2. La Funcionalidad De Crypto Debe Ser Secundaria
Esto está directamente relacionado con hacer que sea ‘divertido’ para jugar. Estos cash-grabs son claramente obvios para los jugadores más experimentados; es por eso que hay una reacción tan negativa contra las criptomonedas forzadas en los juegos. La mayoría de las personas que realmente juegan saben lo que hace que un juego sea divertido y detectarán el clásico “juego-cripto” a primera vista (sorprendentemente, los fanáticos de las finanzas y las criptomonedas que buscan el próximo activo especulativo no lo detectarán tan rápido y es más probable que los utilicen).
3. Las Crypto Deben Ser Incluidas Para Extras Del Juego, No Como Requisitos
Esto se relaciona con los dos primeros puntos. Es obvio, pero nadie lo está haciendo todavía. No se puede cambiar un modelo de negocio tradicional del gaming de la noche a la mañana. Si es así, es porque funciona, y funciona porque gusta. Nadie pagaría Bitcoin por jugar FIFA, pero la gente sí compra cartas de jugadores, incluso por elevadas sumas de dinero.
Tampoco se debe confundir con un juego P2W (pay to win), el hecho de que puedas comprar extras no debería darte ventaja frente a otros jugadores. Riot Games lleva haciendo esto increíblemente bien desde hace muchos años, sin afectar a la experiencia de juego, creando extras para personalizar un perfil sin perjudicar a los demás jugadores ¿por qué no copiar su modelo de negocio?.
4. Mucho Cuidado Con Los Tokenomics
Los desarrolladores de estos juegos deben saber la importancia que tiene esto. Nunca vincules tu juego a una shitcoin a la que puedan hacer un rugpull. Nunca la vincules a tu propia moneda si no te ves capaz de mantenerla a largo plazo. Si desea jugadores a largo plazo, implemente con cuidado tokenómicas que estén diseñadas teniendo en cuenta una economía estable a largo plazo. También desea que la barrera de entrada sea baja para que cualquiera pueda jugar. De lo contrario, será un Axie Infinity donde las ballenas establecen arreglos de becas depredadoras para ‘ayudar’ a los jugadores a ingresar al juego (porque la persona promedio no tiene suficiente dinero para los costos iniciales). O se volverá $LUNA y se convertirá rápidamente en un pump & dump que se extinguirá en un mes (un esquema Ponzi).
A pesar de que los cambios anteriores son factibles y muy prometedores para el futuro de los juegos NFT, no podemos olvidar que las grandes productoras de videojuegos también encontrarán de un momento a otro una gran ventaja en la blockchain para mejorar la experiencia de los jugadores en sus plataformas, ya sea por la interportabilidad e interoperabilidad que permiten, o la verificación inmediata y sin intermediarios de la posesión legítima de sus activos.
Banger Games es una empresa creada y dirigida por españoles que ya se dedica a esto: proporcionan a los productores y desarrolladores una variedad de funciones, como SDK de integración de blockchain y métodos de monetización habilitados para crypto. En su trayectoria de 2023 plantean adaptar a la blockchain títulos existentes reconocidos internacionalmente que permitirán que otras empresas dirijan su mirada rápidamente a este modelo. Permitirán por primera vez desde hace mucho tiempo que los jugadores vuelvan a decidir la dirección de industria y se les brindarán opciones que nunca antes habían tenido, como obtener ingresos mientras juegan.
Puede que el futuro de los juegos NFT nazca por este camino, ya que es muy complicado hacer que un jugador tradicional se tome la molestia en comprender como funciona un juego de WEB3 y todo lo que conlleva, desde la creación de una cartera hasta la comprensión de los movimientos del mercado para estimar los precios de cada token.
Una cosa está clara, y es que el futuro lleva grabada a fuego la palabra blockchain. Las plataformas que ejecutan los juegos deben permitir a los desarrolladores generar y transmitir valor tangible en entornos de juego, lo que además brindará incentivos adicionales a los jugadores.
Sea a través de juegos tradicionales o nacientes, la verdad intrínseca de la posesión de un activo digital comenzará a comprenderse cuando la interportabilidad este sea posible gracias a la blockchain.